¿Por qué necesito un mediador en mi empresa?
Es inevitable que en las empresas surjan conflictos, ya sea porque los equipos están formados con personalidades muy diversas o por nuevos procesos de cambio. Por lo que estas situaciones de mucho estrés pueden acabar con opiniones encontradas, diciendo cosas que no se querían decir y una pequeña discusión acaba
siendo una gran crisis.

Estos conflictos afectan tanto el ambiente laboral como la productividad del mismo equipo de trabajo. Y también suponen un coste elevado no sólo económico, sino también de tiempo y personal ya que se invierte en la búsqueda de la solución del conflicto.
Es por ello, que hay que intervenir cuanto antes, y para hacerlo la mejor elección es contar con un mediador dentro de la empresa, por varios motivos, pero en resumen, porque lleva la resolución de problemas y conflictos por vías no litigiosas, preservando la confidencialidad, las relaciones comerciales y la calidad de las relaciones laborales.
La figura del mediador se encarga de escuchar al personal y resolver conflictos. Su propósito en la empresa es, que cada una de las partes sea escuchada en un marco de privacidad y que los problemas tengan una atención imparcial.
Hay diferentes escenarios donde te será mas conveniente contar con un mediador en tu empresa. Estas situaciones no son solo conflictos internos de la empresa, sino también en desacuerdos entre el proveedor- cliente.

Relaciones entre socios
Muchas son las empresas que cierran cada año a consecuencia de no saber resolver las disputas y conflictos entre socios. Una palabra dicha durante una situación de estrés abre la puerta a la desconfianza y desvían la atención de los gerentes de la empresa de dirigirla a estar discutiendo.
Los conflictos más comunes entre los socios en los que un mediador puede intervenir son los siguientes:
DESACUERDOS
Este tipo de conflictos comúnmente giran alrededor de la toma de decisiones en asuntos importantes de la empresa.
MALOS ENTENDIDOS
Es usual que lo genere una mala comunicación, transmisión de información o instrucciones incompletas.
CAMBIOS GENERACIONALES
En las empresas familiares por lo general no disponen de pactos o protocolos familiares para realizar la sucesión de la empresa familiar, por lo que se generan peleas por obtener el poder de la empresa o la sucesión de la misma.
Sea cual sea el origen del conflicto, se puede solicitar la intervención de un mediador profesional experto en problemas societarios. Además, que, desde la publicación de la ley 5/2012 de mediación en asuntos civiles y mercantiles, la solución que se alcanza en mediación tiene plenos efectos legales y ejecutivos si, además, se eleva a escritura pública.
En estas situaciones el mediador aplica técnicas oportunas en función de cada tipo de conflicto que haya entre los socios. Su intención es involucrar a las partes en un proceso colaborativo para alcanzar una solución en conjunto. Y a su vez crear acuerdos que les permita llevarse mejor en el futuro.
Relaciones entre empresa y clientes
En la relación empresa – cliente los conflictos pueden surgir como consecuencia de “presuntos” incumplimientos de contrato, ya sea por parte del cliente, o por parte de la empresa. Este tipo de problemas suelen presentarse como reclamaciones o quejas.
Existe muchas posibles causas de incumplimientos, usualmente si es por el lado del cliente, son los concernientes al pago del producto o servicio.
Mientras que, por parte de
la empresa, los incumplimientos son por el plazo comprometido, o la deficiencia en calidad o cantidad de la entrega.


Los contratos entre empresa – cliente pueden ser tanto verbales como escritos. Y aunque no siempre existe un contrato en papel, tanto los pactos acordados verbalmente, como los presentados redactados en contrato, parten de lo que el proveedor y el cliente «esperan» de la otra parte.
Por ello cuando uno desatiende los compromisos, a juicio de la otra parte es que surge la controversia y el conflicto.
En estos casos la figura del mediador en tu empresa procura que ambas partes dialoguen para que alcancen una solución amistosa, acordada con la participación de ambas partes. Esto es independiente de que la intención sea o no la de romper relaciones hacia el futuro.
Relaciones dentro del equipo
Es normal que en dentro de un equipo de trabajo se presenten inconformidades, conflictos y malos entendidos. Los motivos de los problemas pueden ser diversos y no estar relacionados con las actividades que desempeñan los trabajadores.
Si bien, los conflictos laborales más comunes en los que puede intervenir un mediador son los siguientes:
DE RELACIÓN
Suele suceder por un choque de personalidades entre los miembros de un equipo.
DE INTERESES
Este tipo de conflictos se da cuando uno de los miembros del equipo tiene necesidades diferentes y realiza sus actividades de manera que obstaculiza los intereses de los otros trabajadores.
DE INFORMACIÓN
Este problema se da debido a malos entendidos entre trabajadores, ya sea por una mala comunicación, transmisión de datos o por instrucciones erradas.
DE VALORES
Este problema es muy común en las oficinas, y se refiere a cuando uno de los trabajadores intenta imponer sus valores personales a otro miembro de su equipo.
ESTRUCTURALES
Su origen es por desigualdades culturales o educacionales en cuanto al rol que cada uno tiene en el trabajo.
Lo primero que hace el mediador junto a las partes involucradas es definir el problema.
Luego se toma el tiempo necesario para comprender los intereses de cada uno, e intentar lograr llegar a un acuerdo satisfactorio para las partes.
Una ventaja de la mediación en estos casos es que, proporciona un canal confidencial para que los empleados puedan plantear inquietudes o problemas sin miedos a represalias por parte de sus superiores.
El objetivo del mediador en los casos de conflicto entre empleados es, aumentar la habilidad de los trabajadores para manejar de manera efectiva la situación y buscar una solución oportuna, pero sobre todo justa y equitativa.
Hoy en día los problemas interpersonales son mas complejos por ello el mediador se ha convertido en una figura importante. Ya que facilita crear un canal confidencial para que los empleados contratistas o vendedores puedan plantear sus problemas y resolverlos de manera amistosa.